El interiorismo y la decoración se han convertido, con todo merecimiento, en una de las “nuevas artes” del siglo XXI. La influencia de lo visual, el Cine, las series y otro tipo de artes plásticas es innegable a la hora de decorar hoy en día una casa. Una opción a tener en cuenta es ver también el exterior de la misma. En esta tienda de toldos en Barcelona podemos ver varias posibilidades interesantes, pero hay tantas ideas como tiendas puede haber en Madrid o Barcelona, y varias de las referencias que tenga el cliente o el vendedor a la hora de explicar cómo quedaría tal o cual cortina o toldo tengan que ver con una película en concreto o con una serie. “Este queda como el toldo de la película x”, “este toldo es parecido al que aparece en la serie y”. Estas dos frases podrían ser escuchadas perfectamente en un intercambio de opiniones sobre la decoración de un salón cualquiera. Es la televisión, todo el mundo la ve, es una absoluta referencia en nuestras vidas actuales.
Lo bueno que tiene el Arte es que se puede colar, y amoldar, en cualquier sitio. Buena muestra de ello, por seguir con nuestra temática de los interiores, es la decoración de cortinas que realizan varios artistas en Villafranca de los Caballeros, un pueblo perteneciente a la provincia de Toledo. Cada año, durante cinco días, los artistas decoran las cortinas de las viviendas de la calle El Santo, que se convierte en una especie de galería o museo de Arte contemporáneo al aire libre. La relevancia que ha adquirido con el paso de los años este concurso es tal que hasta existe un comité de selección de los participantes. Por otra parte, la fiesta se convierte en temática de unos años a esta parte. En la última edición, celebrada entre los días 5 y 10 de septiembre de este mismo curso, la temática central fue Don Quijote de la Mancha, inmortal novela de Miguel de Cervantes. Así, con esta suerte de certamen anual de arte, las calles de este pueblo toledano se llenan de romanticismo, impresionismo, arte conceptual o cualquier estilo y disciplina pictórica que se nos ocurra.
Es solo un ejemplo de cómo una disciplina laboral, que en principio deja poco lugar a la imaginación, el de las cortinas y los toldos, puede terminar convertido en Arte, con todas las letras de la palabra. Distinto es el caso de los interioristas, cuya profesión sí queda instintivamente más cerca de lo artístico, aunque en sentido estricto no lo sea, ni de lejos. La disposición de los espacios, la colocación (armónica o no) de los muebles, la combinación de colores, etc., pueden convertirse en una disciplina artística para los que se dedican al mundillo. El feng shui, por ejemplo, aboga por el uso de los espacios como una especie de mezcla de arte y armonía, que supuestamente ayuda a tener una mayor capacidad para disfrutar de la vida y para afrontar según qué situaciones y problemas.
Puede parecer una locura hablar de Arte cuando en lo que nos centramos hoy es en los toldos. Sin embargo, ¿qué no puede convertirse en arte hoy en día? Es más, ¿qué no podría entrar dentro de la categoría de locura? Si están pensando en redecorar su jardín, en añadir un toldo a su finca o en cambiar las cortinas, piensen, igual les interesa, les apetece o les llama la atención hacerlo de una forma profundamente artística. Para dar un toque distintivo a su espacio, a su vivienda, a su imagen proyectada. Total, el arte es tan democrático como cada uno lo quiera proyectar hacia su exterior. ¿No creen?