Miniaturas. Reproducciones idénticas de aquello que más nos gusta y que pueden ser auténticas obras de arte. Barcos, aviones, coches… hay muchísimas colecciones diferentes que los amantes del modelismo y las maquetas pueden desear tener en una vitrina de cristal pero hay que dejar una cosa bien clara: este hobbie no es barato. Aun así, siempre hay mejores y peores tiendas que, por muy especializadas que estén, tienen grandes diferencias tanto en calidad como en precio. En Racing Modelismo, que están especializados en coches a escala 1:43 y 1:18, podemos encontrar las mejores maquetas de coches y las más demandadas a precios muy competitivos.
Y el caso es que ene l fondo puedo entender los precios que, en algunas ocasiones, parecen escandalosos para algo tan pequeño, porque la meticulosidad con la que trabajan los artistas que crean estas miniaturas es impresionante. Cada detalle del original se ve duplicado en la réplica a escala y obviamente cuanto más fiel es la reproducción más dinero cuesta la maqueta.
A mí personalmente me gustan más las maquetas de barcos que las de coches, sobre todo de barcos antiguos tipo galeones, me parece increíble cómo cada pequeña piececita se ve tratada hasta el último detalle siendo la gemela pequeña de la pieza original, pero tengo que reconocer que es en el mundo automovilístico donde las maquetas cobran más vida. Son los amantes de los coches, sobre todo de carrera y con gran renombre, los que siempre tienen un hueco en el salón donde colocan sus tesoros del mundo de la réplica y creo que puedo entender el motivo.
Pero actualmente puedes encontrar maquetas de casi todo, incluso puedes encargar réplicas de tu casa donde el artesano copia cada mueble y cada objeto que hay dentro de todas las habitaciones. Esto en Estados Unidos se ha visto mucho, sobre todo cuando hablamos de mansiones que pasan de generación en generación, pero para un coleccionista puede ser todo un regalazo conseguir algo así de tu propia casa. Ahora bien, ¿os imagináis cuántas horas tiene que pasar el creador de tal tesoro trabajando con sus manos y utilizando lupas para remarcar cada detalle? Como bien diría el refrán “es un trabajo de chinos” y eso, queridos amigos, hay que pagarlo.
Y es que actualmente estamos acostumbrados a comprar productos fabricados en grandes cantidades por una cadena de montaje que pueden ser de mejor o peor calidad, no voy a entrar ahora en este tema, pero siempre serán más baratos porque consiguen hacer más en menos tiempo y con menos trabajadores. Por eso estamos acostumbrados esos precios y a pagar esos precios y ene l momento en que el que te pones a pagar, no sólo el objeto en sí, sino también las horas que se han invertido en conseguir que luzca tal y como está en el momento de la compra ese precio se infla razonablemente y hay que entender el motivo y no echarnos las manos a la cabeza porque el producto artesano, hecho a mano, ha de ser más caro por fuerza mayor.